lunes, 13 de febrero de 2012

El vértigo que genera lo salvaje de la vida se aplaca cuando uno se reconoce constituido de la misma materia.
El agua no le teme al agua.

1 comentario:

Malena dijo...

Pero hay agua de laguna y agua de mar, oleaje salvaje y charquito estancado, lluvias torrenciales y garúas molestas, hay hielo y vapor.
El agua no teme, pero no se aplaca. Y todos somos agua.